La reflexión sobre el territorio es un factor que determina y orienta los procesos de comunicación en el contexto actual de la ciudad de Medellín, y son precisamente las construcciones que vinculan el territorio a las comunidades las que permiten que se construya el sentido social y comunitario de las propuestas de comunicación. Sin embargo, es válido y oportuno preguntarnos: ¿las experiencias de formación y de construcción del saber con la participación del actor comunitario están permitiendo a las comunidades leer y comprender los territorios? En esta perspectiva podríamos decir que un rol que han desempeñado los procesos de comunicación comunitaria es el de visibilizar las profundas contradicciones que existen en relación a la comprensión y producción del territorio.
No hablamos solo de la delimitación político administrativa, no se puede leer la configuración y el ordenamiento territorial únicamente desde la perspectiva de la movilidad, la vivienda y los servicios públicos. Desde la vivencia y la historia de los actores comunitarios organizados, y desde la labor promovida por procesos de comunicación comunitaria en barrios y comunas de Medellín se demuestra que el territorio es una construcción sociocultural, simbólica, subjetiva, se evidencia que el territorio se produce, está en constante movimiento, se transforma a partir de vínculos, “significa encuentro de actores y de identidades desde lo afectivo, desde los símbolos, desde el lenguaje, desde los procesos de organización en pro de la movilización y las reivindicaciones sociales”.